El sector de las franquicias facturó el año pasado 105 millones de euros en Extremadura, lo que supone un ligero ascenso respecto al año anterior cuando alcanzo los 99 millones. La facturación ha crecido ligeramente gracias al aumento de cadenas instaladas en la región, alcanzando las 28 operativas de las 65 inscritas en el registro de franquiciadores.